Al despertar Gregor Samsa una mañana, tras un sueño intranquilo, encontrose en su cama convertido en un monstruoso insecto. Al apreciar que tenía alas, no se lo pensó dos veces y sin dilación se fue al trabajo volando por la ventana, saltándose los semáforos y la Ronda Litoral. Sus superiores quedaron tan gratamente sorprendidos porSigue leyendo «La metamorfosis, de Albert García Elena»